LOS REFRANES
Dorys Rueda
Investigo y estudio los refranes, sentencias y dichos populares, desde hace más de 40 años. Este lenguaje refleja no solo la diversidad cultural, sino también los valores fundamentales de los padres. Por esta razón, en lugar de abordar el tema de manera tradicional, pedí a mis alumnos que, por un lado, escribieran los refranes que sus padres utilizan con ellos y por otro, explicaran por qué lo hacen, cuál era su fin.
Reproduzco el trabajo realizado:
“Más vale prevenir que lamentar": los jóvenes carecemos muchas veces de responsabilidades y no medimos las consecuencias de nuestros actos, en relación a nosotros mismos, a nuestras familias y a otras personas. Los padres se sirven de este dicho para que nosotros, sus hijos, tomemos precauciones y nos anticipemos a los problemas, en lugar de enfrentar después las consecuencias.
"El que mucho abarca, poco aprieta”: el conseguir todo de manera inmediata es una característica de nosotros, los jóvenes. Por ende, nuestros padres utilizan este refrán para sugerir que es mejor que nosotros nos concentremos en pocas cosas y hacerlas bien, en lugar de intentar abarcar demasiado y no lograr nada.
"En boca cerrada no entran moscas": las personas jóvenes vivimos inmersas en las redes sociales, donde es muy difícil aprender el valor de la discreción. Por esta razón, los nuestros padres se sirven de este refrán para que aprendamos a ser reservados y a pensar antes de hablar. También para recalcar que es mejor no mentir ni exagerar.
"No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy": los jóvenes por lo general somos muy cómodos y algo perezosos, dejamos muchas cosas para “después”. De ahí que nuestros progenitores utilicen este refrán para que seamos diligentes y cumplamos con nuestras responsabilidades.
"A caballo regalado no se le mira el diente": muchos de nosotros no aceptamos cualquier regalo de buen grado y siempre ponemos reparo en lo que recibimos. Nuestros padres, a través de este dicho, nos estimulan para que aprendamos a ser gratos con lo que recibimos, sin ver fallos, defectos o el costo económico.
“Cuando estás de ida, yo ya estoy de vuelta”: los jóvenes pensamos que conocemos todo y que sabemos más que nuestros padres. Por esta razón, nuestros progenitores se sirven de esta locución coloquial para decirnos, en pocas palabras, que nosotros no podemos superarlos en astucia ni experiencia, aunque nos esforcemos mucho.
"Antes de actuar, piensa dos veces”: Los jóvenes no siempre reflexionamos antes de actuar. Es frecuente que nuestros padres recurran a esta sentencia para que nos fijemos en lo importante que es tomar decisiones conscientes, antes de que nos veamos involucrados en situaciones en las que corramos algún riesgo.
"Dime con quién andas y te diré quién eres” “Quien con lobo se junta, aullar aprende”: la honestidad es un valor fundamental que nuestros padres quieren inculcar en nosotros, para que huyamos de las malas compañías y seamos personas decentes y éticas.
“Poner las cartas sobre la mesa”: muchas veces las personas jóvenes mentimos y disfrazamos nuestras culpas y errores para evitar reproches y castigos. Nuestros padres acuden a este refrán popular para hablarnos sin rodeos sobre un tema específico, mostrándose abiertos y sinceros en sus intenciones.
“Escupir al cielo para que le caiga en la cara”: los jóvenes a veces no medimos nuestras palabras y podemos herir a cualquier persona. Nuestros padres recurren a este dicho popular para que tomemos consciencia de no hablar mal de nadie, porque lo dicho puede revertirse en nosotros mismos.
“Estar hasta el copete”: Esta locución coloquial muestra cuán fastidiados, hartos y cansados están nuestros padres de algo que decimos o cometemos de manera reiterativa.
“Luego de la tempestad viene la calma”: Nuestros padres utilizan esta sentencia para animarnos, diciéndonos que lo adverso y negativo pasará y vendrán tiempos mejores.
La conclusión a la que llegaron fue la siguiente:
"En resumen, los refranes que utilizan nuestros padres están impregnados de una sabiduría que se ha transmitido de generación en generación. Son guías sencillas que orientan nuestro comportamiento y nuestras decisiones de vida. Hay que prestar atención cuando ellos hablan".
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Dorys Rueda
Otavalo, 1961
Maestra, investigadora, escritora.
Directora: elmundodelareflexion.com