LA CHIFICHA SE VIENE A UNA PERSONA MAYOR
Por: José M. Chávez M
Hubo una Chificha que en cualquier parte que se tuvo con los niños siempre les pidió para comerse, esto lo venía haciendo durante mucho tiempo. En uno de esos días cuando ella se convirtió en un niño para comerse encuentra con un oso, al encontrarse con ella el oso le dice: -a dónde vas- la chificha se había convertido en una mujer joven y hermosa, el oso se había enamorado pero cuando le preguntaba algo, ella no sabía responder nada; viendo que no le contestaba el oso se cansa y le deja diciendo que otro día le insistirá para que hable.
Esta vieja vivía en una cueva muy lejana al pueblo y allí se vio afectada por los niños para comerse, nadie sabía que ella vivía allí, el tío del oso que era un cóndor; el oso como estaba bien enamorado de ella insistió en averiguar dónde vivía, el cóndor como era su tío le indica dónde vive y por dónde debe ir. Una vez que le avisó se va muy apresurado a la casa de ella, cuando llegó, ella le hizo entrar por la puerta de atrás porque en la puerta de adelante estaban todos los niños que ella había cogido, los niños estaban todos muertos, ya llegaron para comerse En esos mismos momentos los padres de los niños andaban buscándoles, mientras que el cóndor estaba esperándole a su sobrino, tenía miedo que le pase algo; en eso el cóndor se encuentra con algunos de los padres de los niños y les dice –qué andan buscando-, uno de los padres contesta –se me perdieron dos hijitos míos, no les has visto? - el cóndor le responde –sí, la chificha les lleva a la cueva, ahorita está ahí mi sobrino cuando regrese le preguntamos-. Los padres esperan mucho tiempo y el oso no regresó, después de tanto esperar y ver que no llegaba el oso, el cóndor dice: -yo estoy muy preocupado, yo conozco la casa, vamos para allá-.
Los padres muy contentos se dirigen a la casa de la Chificha, cuando ya estaban muy cerca de llegar el cóndor dice: -ustedes esperen un rato, yo me adelanto para ver si están ahí-, en eso los papás se quedaron y el cóndor se adelantó. Ya había pasado una hora y el cóndor no regresaba y los padres decidieron acercarse a esa casa; ahí estaban el cóndor, el oso y la chificha, la vieja acostumbraba dormir al medio día, en eso el cóndor aprovecha para buscar a los niños. Los encuentra, estaban en un cuarto obscuro, el cóndor como era un animal gigantesco les mete a los niños en su nariz para poder salir, justo en el momento que iba a salir los padres de los niños y golpean la puerta, la chificha se levantando abrir y les dice: -que quieren- nosotros venimos a que nos entreguen a nuestros hijos- dicen los padres, en eso la chificha muy sorprendida va en busca de los niños y se da cuenta que no están adentro; le pregunta al cóndor y al oso, el cóndor le dice –¿qué niños? - pero su voz salía media ronca, se da cuenta de que algo tenía escondido y le dice -¿por qué estás hablando ronco? - el cóndor le dice que está cogiendo la queja, mientras que los padres de los niños insisten en que les entreguen a sus hijos. No sabían que el cóndor les tenía escondido en su nariz, uno de los padres por la desesperación de encontrar a sus dos hijos comienza a golpear a la vieja con un palo, al recibir muchos golpes la vieja se quedó desmayada; los familiares creyeron que estaba muerta. El cóndor todavía no les avisó que él tenía a los niños, los padres con mucha tristeza regresaron a sus casas y lamentando la muerte de ella; cuando ya caminado largo rato, la vieja recuperó el sentido y empezó a seguirles. Cuando ya estaba muy cerca de ellos les dice: -a mí no me pueden matar fácilmente, todavía tengo quién me defienda, tengo dos esposos y al ver qué alrededor de ellos estaban muchas chifichas; luego las chifichas caminaron lentamente y de pronto cayeron un árbol el cual cayó más de ellos, muriendo al instante. Mientras los niños se quedarían con el cóndor que les había librado de las garras de la chificha.
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